sábado, 7 de abril de 2012

Sábado Santo-Soledad de la Virgen


San Rafael Arnáiz (santo español del s. XX) escribió en una de sus cartas a conocidos: "Esta noche quiero ponerte dos letras y expansionarme un poco hablándote de la Señora" (tomado de Rafael Arnáiz, La Virgen Madre, Madrid 1988, p. 79).

Antes de dormirme quisiera dejar aquí también una breve reflexión para esta noche. En la Pasión hay un hecho que llama la atención, y es este: que la Virgen estuviera allí. El Señor podía haber previsto las cosas para que su Madre no se enterara de nada hasta después de su muerte. Podía, sin más, haberla dejado en casa y evitarle todo aquello. Pero no, también quiso su entrega total. La quiso en el Calvario.

Podemos preguntarnos hoy Viernes Santo, cuando el Señor ha muerto en la cruz:
-¿Quieres que yo también me entregue así, totalmente?
María con el cuerpo de su Hijo en brazos. Así termina este día. María con su Hijo entregado. Ella sabe que dentro de poco resucitará, sabe que ese final es un principio. ¡Ojalá, Madre mía, terminaras también así este día: con mi entrega!

Quedáis todos invitados a la Meditación de la Soledad de la Virgen (Sábado Santo) a las 11 horas en la iglesia parroquial. Duración 30 minutos.