Este villancico es precioso. Al margen de la interpretación que hacen los miembros de este coro-rondalla -que es realmente emotiva-, es muy emocionante lo que cuentan. Esta tarde pasada; hice la oración considerando las cosas que ahí se dicen. A ese niño Dios le he pedido como tantas veces por todos. Dejo aquí la letra porque puede servirnos a todos para rezar.
Melchor, Gaspar y el negro Baltasar.
Arrope y miel le llevarán,
y un poncho blanco de alpaca real. (Bis)
Changos y chinitas duérmanse
que ya Melchor, Gaspar y Baltasar,
todos los regalos traerán
para jugar mañana al despertar.
El niño Dios muy bien lo agradeció,
comió la miel y el poncho lo abrigó
y fue después, que sonrió,
y a media noche el sol relumbró.
No hay comentarios:
Publicar un comentario